Para muchas mujeres no es fácil aceptar llevar una relación seria con un hombre menor, más si esta es la primera vez que le ocurre y la diferencia entre ellos es de unos 10 años más o menos. La cosa se pone aún más difícil cuando la marcada diferencia de edades se descubre luego de un tiempo de iniciada la relación, y por parte del novio.
Las dudas empiezan a dar vueltas en la mente de la consternada novia, que no sabe si debe continuar con su relación, o terminarla por miedo al qué dirán. Esto es más difícil cuando nos damos cuenta de que estamos enamoradas y la idea de la separación es un suplicio.
Si crees que debes separarte solo para evitar que la gente te señale, estás equivocada; en todo caso, es mejor conocer algunas de las ventajas de estar con un hombre menor y atreverte a sacar tu relación adelante.
En beneficio de los novios menores podemos decir que son más transparentes que los mayores, tal vez porque debido a su experiencia los mayores tienen miedo de sufrir y prefieren prevenir sus acciones, por lo que no se muestran sinceros.
Los jóvenes prefieren llamar a las cosas por su nombre y no se andan con rodeos extraños para ser claros cuando algo no les parece; por ejemplo, si tú no quieres ir a tal sitio o temes decirle lo que te preocupa, el te pedirá que seas clara y que no disfraces lo que sientes, y lo mismo hará él.
Cuando quieres desahogarte, él te escucha atentamente y te ayuda a buscar la solución, no solo te apoya sino que se acuerda de lo que le dijiste, confirmando que sabe escuchar. Si a ello le sumas que son cariñosos, apasionados, espontáneos y para nada prejuiciosos, podrías estar hablando de un hombre muy especial. Para ellos el miedo a hacer el ridículo no existe, sobre todo si es por amor.
El éxito de una relación de este tipo está en saber aceptar a tu novio como es, sin tratar de cambiarlo ni tratarlo como a un niño. Solo así podrás vivir plenamente el presente.
Fuentes: PensandoEn.
Imagen: MyCine.
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